Ghost Rider y Henry Rollins, dos fuerzas de la naturaleza
Siempre fue y es uno de mis personajes preferidos de Marvel Comics. La vis atractiva que tienen los antihéroes no la pueden tener ni de lejos los héroes convencionales, que no se salen del patrón de corrección establecido por la sociedad.
Este es el caso de Ghost Rider, un forajido demoniaco que subido en su moto a modo de corcel y envuelto en llamas ajusticia a los villanos sin piedad, y sin someterse a leyes establecidas por los humanos.
Un pacto con el diablo protagonizado por Johnny Blazepara salvar la vida de su padre, hizo que se liberara a Satanás dentro de él y al caer la noche el demonio sale a cabalgar en la rugiente y atronadora moto por las carreteras del desierto. Blaze debe continuamente luchar contra su yo interior, y no sucumbir a las garras del inframundo para perderse en él para siempre.
Posteriormente vendrían otros Ghost Rider, Danny Ketchy Robbie Reyes, todos ellos en la misma tesitura de vencer al mal tanto exterior, como el que tienen interiormente que les quiere abrasar con un fuego inmisericorde.
Al galope de sus motos son seres totalmente indestructibles, la leyenda explica que al haber sido creados por Dios, solo Dios puede acabar con ellos.
Mephisto se erige en su principal enemigo, intentado continuamente llevar al lado del mal a Ghost Rider en una carrera desesperada llena de peligros y amenazas.
Henry Rollins versionó el tema “Ghost Rider” de la banda protopunk Suicide. Este tema se encontraba originariamente en el álbum homónimo de la banda editado en 1977, y está basado el corte en el personaje de Marvel.
Rollins realizó un cover brutal con su Rollins Band, para la banda sonora del film “The Crow” (1994). Aunque antes en 1987, el propio Rollins grabó este tema en su álbum “Hot Animal Machine”.
Gran versión que Rollins desarrolla de manera brutal, dándole su toque muy agresivo y hardcore al tema; quedó perfecto dentro del soundtrack del film antes comentado.