“Who´s in the house” y el polémico álbum que marcó el camino musical a toda una generación (Limp Bizkit)
Año 2001 un adolescente de 16 años recién cumplidos en pleno apogeo de pubertad y tratándose de hacer un hueco en el instituto a través del graffiti hacia sus primeros coqueteos también con la música con nombres como Metallica, ACDC o Rammstein. Hasta ahí todo más o menos normal pero ese año sus padres cometieron un grave error. Regalarle por Navidad el tercer trabajo de los chicos de Jacksonville capitaneados por el polémico Fred Durst, es decir Limp Bizkit. Desde ahí nada fue lo mismo, a ese adolescente le caló tanto ese disco que lo llegó a rayar y aquí él mismo os dirá el porqué desgranándolo tema a tema.
Tras una Intro con voces de otro planeta donde se repetía el Whos in the house? los Bizkit iban como su propio nombre indica introduciéndonos una buena dosis de ritmos hiphoperos y guitarrazos aderezados con el flow de Fred Durst y es que te guste o no es más que un músico, polémico y con una gran visión empresarial que supo como unir el género del new metal tan aclamado por aquel entonces con el mundo de las grandes discográficas y como ganar grandes cantidades de dinero.
Con Hot dog” y su “Ladies and gentleman introducing..” todo un clásico ya, nos derrochaban energía a raudales para abrir el albúm, gracias sobre todo al riff inicial de Wes Borland alma creativa del grupo gracias al cual un servidor empezó a tocar la guitarra. Con extractos del “Closer” de NIN en su estribillo “you wanna fuck me like an animal” y con multitud de Fuck en su estrofa el tema se convirtió en todo una declaración de intenciones, no se andaban con medias tintas y abrían el disco a lo grande. My generation era el flow en canción, con el comienzo de la batería y su posterior riff que estallaba en tu cara mezclado con un bajo muy rítmico y galopante. Todo un delicatesen para los bajistas mas percusivos. Momento estelar el cambio de ritmo y bajón de intensidad del tema para luego terminar muy arriba con un scratch atronador. Muy propio de ellos, marca de la casa como bien dicen en el inicio del tema “Limp Bizkit style”. Tras esta clara y evidente demostración de que lo suyo era el rapmetal con mucha actitud y chulería nos encontramos con Full Nelson un tema más metalero e incluso rozando más el industrial en su instumental que los anteriores pero conservando siempre el sello bizkit. Destacar el final del tema donde encontramos por fin a un Fred Durst enfadado, desesperado que muestra su rabia gritando cada vez mas desgarrado rompiendo en dos con su Burn this motherfucker now.. se convierte en una de las partes más intensas del álbum para acabar con una base más suave a cargo de Dj Lethal.
Tras estos cortes donde no daban tregua dejaron paso a un oasis sonoro para poder cargar las pilas con la emotiva y archiconocida My way. Un tema muy bien compuesto para todos los públicos donde vemos una banda más cercana al rock de los 90 que al metal, un tema que te atrapa con sus melodías melancólicas. Todo un hit para más de una generación y es que como bien hemos dicho antes los de Jacksonville sabían muy lo que tenían que hacer para alcanzar el éxito mundial y jugaron así sus cartas para lograrlo. Tras su segundo disco “Significant other”eligiendo a Terry Date para que les produjera el disco quien ya había trabajado con artistas como Deftones o Pantera y con la MTV publicando a todas horas sus videoclips ganaron mucho más publico de lo que ya tenían, que ya es decir. La fórmula del éxito era infalible en esos momentos.
Rollin sin duda el tema más oído del disco característico por su video, donde se basa en sacar cochazos y chicas raperas casi como un video manido de rap de hoy en día por su coreografía y su baile. Si bien a un servidor es el tema que menos le gusta del álbum he de reconocer que es un hit superfórmula que tanto gustó a raperos como a metaleros pero no refleja lo que es el álbum en su totalidad, muy correcto para animar cualquier fiesta del género. El tema siguiente dedicado al actor de Hollywood Ben Stiller Livin it up es otra cosa, misteriosa, potente y con un estribillo que te perfora el cerebro para asentarse en tu inconsciente. Muy importante el papel del bajista Sam Rivers en este tema sin él no es lo mismo y en general en todo el álbum. Es un sine qua non que a pesar de no parecer a simple vista algo destacable, está detrás de todo creando una sólida base rítmica infranqueable dando groove a las cuatro y cinco cuerdas. Todo un acierto el efecto pregunta-respuesta del tema dándole el punch que necesitaba, un tema salvaje en su final cuyo mensaje incita a vivir al máximo la vida si limites.
Parecido a My way, nos topamos como de la nada con The one, un tema melancólico, nuevamente el papel de Borland con sus efectos le da mucho protagonismo al tema y cuando parece que acaba los de Jacksonville vuelven a enfundarnos con otro estribillo pegadizo. El tema se cierra con una melodía propia del Trip-hop que suaviza y facilita la digestión de los temas más explosivos que loanteceden. No podían faltar los corte puramente hip-hop en este trabajo como Gotcha Groove on, tema muy gangsta rap que recuerda con su base y teclado al famoso tema de Coolio de la película Mentes peligrosas. En esta ocasión cuentan con colaboración de Xzibit dándole ese toque macarra que se combina a la perfección con la voz característica de Fred Durst así también como la versión mas gangsta rap de Rollin junto a otros artistas de renombre en el género hip-hop como Method man, Red man o DMX llamada Rollin (Urban assault vehicle).
Take a look around habla por sí sola es la mezcla perfecta de lo que para mí es Limp Bizkit. Fuerza, intensidad, melodía y flow. Versión que hicieron para la película de Misión imposible 2 y mejorando a la original que ya era un buen tema. Con un rapeado cantado en algunos momentos sobre la conocida melodía de la película ejecutada por Wes Borland que te va atrapando hasta que empieza el demoledor riff del estribillo. Un tema que debería entrar en la definición de New metal, no creo que no haya nadie que no haya escuchado este tema o incluso botado con el subidón final, ese momento en el que John Otto golpea su caja con su particular sonido agudo para dar lugar al estribillo. Ya sea en tu cuarto a solas, en una fiesta con amigos o en un bar tu cuello se ha disparado solo seguramente, señal de que es un buen tema.
Si bien estos temas emanaban buen rollo, energía o rabia este It,ll be ok trasmite oscuridad, ganas de llorar, desesperación. Otro tema escondido en el disco pero que tiene una gran personalidad y esencia que se aleja de la formula de hit que nos tenían acostumbrados y que te deja un sabor agridulce por sus bonitas pero agonizantes melodías dando lugar a la reflexión. Siguiendo esa senda pero de carácter más intimista y con una gran producción en su videoclip nos encontramos con Boiler, quizá el tema más introspectivo del álbum y el que menos caló en un primer momento pero a lo largo de los años ha tomado fuerza y se convierte en uno de los temas más conseguidos por su excentricidad y por salir de su tónica habitual. Voces dobladas, guitarras cortantes y atmósferas que envuelven el sonido son la constante habitual en este corte.
Como en todo buen disco tiene que haber de todo y después de pasar por varios estados de ánimo, de estar arriba y abajo tocaba ya la balada del disco “Hold on”con el difunto Scott Weiland de STP (RIP). Una balada que podía perfectamente haber escrito la banda de Weiland Stone Temple Pilots y que junto a la voz de Durst lo convierte en todo un temazo acústico relajante y de ambiente que a medida que avanza el tema se vuelve más intenso. Un corte muy emotivo y nostálgico.
Al igual que para la generación de los 80 Guns and roses fue todo un hito en el mundo del Hard rock, Limp bizkit hicieron lo propio con nuestra generación, la del 90 y aunque para muchos sea su peor disco para otros es su punto de inflexión done alcanzaron el éxito mundial manteniendo su huella. Sea como sea la polémica siempre está servida y ha rodeado la banda desde sus tiempos más pretéritos. Amados y odiados a partes iguales pero nunca ignorados ni olvidados. Bajo mi punto de vista un trabajo redondo.