[Crítica] Kayser Sozé – “Gods Meat Cult”
El nombre de Kayser Sozé, no os debería sonar únicamente a un villano de pelicula (por cierto muy buena), a partir de ahora lo deberíais asociar a un Power Trío de Hard Rock Blues, de calidad exultante.
Este tercer disco de la banda llamado “Gods Meat Cult”, nos presenta a una banda sólida, que sabe perfectamente lo que hace, y así nos lo hace llegar de forma, directa y totalmente descarnada.
En este álbum nos vamos a encontrar, desde el principio, un rock hecho a tumba abierta, heredero directo de bandas como Led Zeppelin, Grand Funk o incluso unos actuales Wolfmother. Todo suena a añejo, pero a la vez muy actual, guitarras contundentes que van del rock al blues sin inmutarse. La voz de Javier Pozo nos guía de manera perfecta a este mundo de revival setentero, de connotaciones psicodélicas. La base rítmica del grupo no le va a la zaga, ya que tanto el bajo, comandado por Antonio Molina, como la bateria regida por Lover Lion, dan al grupo un fuerza y contundencia realmente espectaculares. La banda en sí, suena como si se tratara del doble de integrantes que la componen; todo nos llega con mucha fuerza.
Desde el comienzo con el tema que abre la obra, “Phenomena”, nos advierten que lo que vamos a escuchar es Hard Rock de muchos quilates, con la presencia del blues como vigilante impertérrito a todo lo que acontece en el disco. Canción contundente para empezar, y que deja un sabor de boca fantástico. De corte parecido al tema anteriormente comentado, son los temas “Snake Eyes”, “Stoned” o la zeppeliana “Firewood”, riffs muy a lo Page mandan en toda la canción, donde la melancolía del blues comanda al fiero Hard Rock.
No debemos dejar de comentar, la utilización del vibráfono o de los teclados Hammond, que dan a todo el conjunto un marchamo de autenticidad bastante alto. En canciones como “Lips To Lick” o en la preciosista “Namaste” la utilización de estos sonidos dejan su impronta.
Por último debemos destacar, el que es para mi gusto, el mejor corte del disco, la épica “Oceans Of Blood” donde el grupo da rienda suelta al oficio, y buen hacer que atesoran, regalándonos un tema lleno de rock, blues, cambios de ritmo y sobre todo carácter.
Gran tercer disco de estos albaceteños, si hubieran nacido en Nueva Orleans, seguro que ya les conocerías, ¿a qué esperas para hacerlo?.