Cochambre: “El rock tiene la energía y el equilibrio en todos los detalles para no ser un producto de usar y tirar”
Os presentamos a los metaleros Cochambre:
Queremos saber de vosotros, habladnos de los comienzos de la banda…
Allá por 2014 Brais (guitarra) y yo (Koldo, guitarra) deshicimos la banda con la que llevábamos una década tocando y decidimos grabar unas versiones con Weah y su monstruosa voz. Ya nos conocíamos desde 2o o 3o de BUP, así que Cochambre empezó a cobrar la forma de la banda que es hoy en día rápidamente.
Publicamos esas versiones en un EP titulado “Covered in Blood” que fue grabado, producido y editado por nosotros mismos en 2015. Al poco fichamos a Kevin (bajo) y Óscar (batería) para darle continuidad al proyecto. Con esto empezamos a ensayar y, allá por 2018, estábamos ya componiendo lo que sería “Doom Über Alles”, nuestro primer LP.
¿Cómo estáis viviendo la pandemia?
Trabajando todos y aguantando el chaparrón con bastante suerte.
Por otro lado, con el parón obligatorio de la música en directo guardamos de manera agridulce “Doom Über Alles” esperando a poder presentarlo en directo con las fechas que ya teníamos cerradas. A día de hoy consideramos que fijar una fecha que sabes que (seguramente) no vas a dar es un acto bastante irresponsable para la banda y para el propio promotor del evento.
Así que, como no hay directos, hemos empezado a componer nuevos temas (menos Kevin), trabajar en nuestros estudios caseros (menos Kevin), acondicionar el local de ensayo (menos Kevin) y practicar con metrónomo (menos Kevin)…
No os preocupéis por Kevin, está bien y libre de COVID, pero creo que le ha dado vergüenza contestar él la entrevista.
¿Qué queréis conseguir en el mundo de la música?
Disfrutarlo, como llevamos haciendo durante dos décadas, y conseguir que los 4 piraos que disfrutan de nuestra música puedan seguir escuchándola. Se nos podría tachar de poco ambiciosos (cosa que podríamos rebatir) pero lo contrario, en el estado actual del negocio, es una mera ilusión.
Si quieres vivir de la música mejor que seas hijo de algún político, te hagas profesor o busques otras alternativas.
¿Qué es para vosotros el rock, en definitiva los sonidos distorsionados?
Pues el rock es la música con la que nos hemos criado. Todos los de nuestra generación sabéis de lo que hablo: esperar meses a que salga un disco, conseguirlo y encerrarse a escucharlo, leer las letras, flipar con la portada e ir descubriendo nuevos detalles a cada escucha. El rock tiene la energía y el equilibrio en todos los detalles para no ser un producto de usar y tirar. El grunge nunca tuvo esa energía y el Djent, por hablar de algo más moderno, nunca ha tenido ese equilibrio.
Personalmente, yo fui a clases de solfeo con mi abuelo de pequeño, posteriormente estuve unos meses en clase de piano y no le hice ni caso… entonces Weah te pasa el Black Album o el Sabbath Bloody Sabbath, quedas con Brais y dos guitarras españolas para tocar un blues, se crea un pique entre todos los colegas para sacarse un riff de Pantera, etc. Esa energía adolescente no existe en otro género: el rock minimiza las canas, mantiene la piel tersa y las deposiciones regulares.
¿Cómo es la manera de componer en vuestra formación?
Generalmente los guitarras desarrollamos unos riffs y presentamos una estructura del tema, pongamos intro, verso, estribillo. Si no está lo suficiente maduro se repasa antes de exponerlo a la banda. Entonces se presenta al resto: se le explica el bajo y la batería a Kevin y Óscar y, si están finos, aportan su granito de arena. Finalmente Weah recoje este batiburrillo y se presenta con una letra, nos muestra sus líneas vocales, añadimos mucha reverb y todo coje forma.
¿Qué queréis expresar con vuestra música?
POBREDUMBRE. La rabia adolescente que mencionaba anteriormente aplicada a nuestros oxidados cuerpos pseudo-cuarentones, cagándonos en cristo y en todo lo que se menea: políticos, Iglesia, bocachanclas. Velocidad, mala hostia, un toque de amor y dulzura y lo que conocemos como ZAPATILLA.
La música hace que no pisemos los bares, así que todas las burradas que no soltamos ahí acaban aflorando en el local de ensayo, las grabamos a 24bit y se las dejamos a la humanidad a coste cero, por si quiere disfrutarlas algún día.
Decidnos una banda que os sirva de referencia en vuestras creaciones.
Respondería el típico tópico de que citar sólo una banda es imposible, pero voy a hacer un MIX en nombre de cada uno de los miembros de Cochambre, a ciegas y confiando en lo que los conozco:
@Weah – Entombed
@Brais – Carcass
@Kevin – Lamb of God
@Oscar – Grave
@Koldo – No podría citar sólo una banda, pero si tuviera que decir una sería…
Habladnos de vuestro actual material publicado ¿satisfechos con el resultado?
Habiendonos encargado de todo el proceso personalmente (composición, grabación, mezcla, masterización, diseño gráfico…) sería para pegarnos un tiro el no estarlo. ¿Hay cosas que aprender? sí, ¿que mejorar? claro. Una cosa es querer a tu criatura protozoica y la otra no tener dos dedos de frente.
Respecto a “Covered in Blood” y “Recovered in Blood”, los EPs de versiones, también estamos orgullosos de haber pasado unos temas tan heterogéneos por el filtro de Cochambre.
Tres discos sin los que no podríais imaginar la vida…
Black Sabbath – Technical Ecstasy
Iron Maiden – Virtual XI
Metallica – St. Anger
¿Qué opináis de las bandas tributo?
Veo ese tema en todas partes y es una discusión que no me interesa en lo más absoluto pero… como toco en una, me voy a mojar intentando no alargarme en exceso:
Parto de la base de que no se escucha nueva música y de que, si el futuro de esta es Billie Eilish, apaga y vámonos, aunque mucho mejor con gente con el talento de Billie que con esperpentos como Taburete, claro. La industria del ocio cree que no hay ideas nuevas y se dedica a reciclar las que existen orientándolas al público con poder adquisitivo: cuarentones trabajadores a los que nos enganchan mediante la nostalgia. Esto ya se daba en el cine y las series con el revival de los 80 ́s y ahora ha llegado al mundo del videojuego a costa de remakes y reboots de las sagas de su época dorada.
Antes de dispersarme voy a aclarar que, para el caso y no liarla más, considero tributo y banda de covers la misma cosa. Asimismo, obviaré al 1% del público que se ha escuchado la discografía de Robert Plant fuera de Led Zeppelin o que se haya dignado en escuchar los discos de Black Sabbath con Tony Martin una y otra vez.
Si yo tengo una sala de conciertos de rock, el grueso de mi público ha pasado los 30 y tiene ganas de escuchar a Bon Jovi, Judas Priest o Metallica… al fin y al cabo es lo que llevan pidiéndole al pinchadiscos de su garito habitual durante 20 años: Living on a Prayer, Painkiller y Enter Sandman. Y aún vamos a peor cuando, hoy en día, se pincha con Youtube, donde lo más original es Leo Moracchioli pasando todos los clásicos por su genial filtro Nu-Metal. NO! Todos conocemos algún grupazo gracias a Youtube, pero estamos de borrachera y lo que cunde es que todo el grupo nos conozcamos la cancioncilla… y si nos escucha todo el bar mejor.
Comprendemos que una sala de conciertos es un negocio y tiene que hacer dinero, comprendemos que el músico quiere difundir su música y, A SER POSIBLE, ganar unos euros con su trabajo, pero el entendimiento y que todas las partes sean retribuidas está lejos de llegar (y llevamos décadas), así que la sala programa sólo tributos y el músico acaba montando uno para poder tocar en algún lado.
No sólo la sala se equivoca, claro. A todos se nos atragantará que un tributo edite un DVD en directo sin saberse una letra de Bon Jovi mundialmente conocida o rajaremos de los tributos cuando ni hemos escuchado (menos comprado) los discos originales compuestos por sus miembros. Cuando eres oyente hay cosas que chirrían, pero cuando tú mismo eres músico, puede ser peor, y aquí acabo:
Recuerdo unas vacaciones de navidad en Ciudad de Mexico. Allí me cansé de ver bandas residentes en garitos (bandas residentes, eso existía en España, no?) y un día llegamos al centro de la ciudad: garito, litros y litros de birra, tapas a las 3 de la mañana y banda residente marcándose una de Boston, otra de Toto, Paradise City de G’N’R, Dark Side of the Moon… y entonces llega el cantante (“¿leches, qué pasó aquí? estaba cantando el teclista!!!”) y se marcan un Bohemian Rhapsody. Veo los carteles del local y la misma banda el miércoles hace un tributo a Pantera, el jueves a Megadeth y el viernes a Metallica… como músico, si puedo considerarme tal, me daría PUTA VERGÜENZA opinar mal de esta gente.
En resumen: si realmente le repatea a alguien este tema lo mejor que puede hacer es replantear en qué ha fallado él como promotor, como oyente y/o como músico, porque es lo único que va a poder cambiar (si puede o quiere hacerlo).
Un deseo…
Que el segundo LP de la banda venga pronto, en Digipack, con unos calcetines para Kevin.
Para los seguidores de Mautorland, ¿por qué deberían escuchar vuestra música?
Si sois muy jevis para el Death, muy brutos para el jevi, punks a secas o simplemente queréis escuchar un poco de música sincera hecha por cinco palurdos, Cochambre os manda ZAPATILLA a todos.
Ahora en serio: no somos Death, no somos Black, no somos Thrash pero bebemos un poco de todos, hacemos lo que nos gusta sin pararnos en la etiqueta. Si os gustan los guturales y queréis un poco de Metal para mover el esqueleto y sentiros los más cafres de vuestra vecindad subid el volumen y poneros “Doom Über Alles”, ¡algún tema os gustará!