Fran Ferriz: «Siempre he buscado que mi trabajo no solo sea estético, sino que también transmita sentimientos»
Entrevistamos al ilustrador y artista multidisciplinar Fran Ferriz. Repasamos su trayectoria profesional y nuevos proyectos.
¿Cuál es tu primer recuerdo asociado al mundo del dibujo, ilustración etc…?
Mi primer recuerdo nítido es ver a mi padre dibujando en casa. Él era carpintero de profesión, pero tenía una gran afición por el dibujo, y conservo la imagen de estar a su lado, siendo yo muy pequeño, mientras ambos dibujábamos. Supongo que ese fue el germen, ese contacto temprano con la creación en un papel.
¿Qué es lo que buscas plasmar con tu trabajo?
Desde muy joven me han interesado las emociones, incluso antes de que el concepto de «salud mental» se popularizara tanto. Siempre he buscado que mi trabajo no solo sea estético, sino que también transmita sentimientos y, si es posible, los provoque en el espectador; que toque alguna fibra sensible. En los últimos años, este enfoque se ha vuelto más personal, utilizando mis dibujos y libros como un canal para expresar mis propias vivencias. Me interesa abordar la salud mental desde una perspectiva diferente, a menudo con humor y siempre con la máxima sinceridad. Ese es mi objetivo principal: transmitir y generar emociones.

¿Qué es lo más complicado de tu labor como ilustrador/diseñador?
Generalmente, lo más complicado surge cuando afrontas un encargo concreto y debes adaptarte a las directrices del cliente o del autor, mientras intentas mantenerte fiel a tu estilo y a tus convicciones artísticas. Es un delicado equilibrio. También resulta difícil, en ocasiones, rechazar proyectos por motivos éticos o principios personales. Por ejemplo, hace un tiempo tuve una experiencia que se hizo bastante conocida al declinar diseñar la mascota para una importante casa de apuestas. Sencillamente, no colaboraría con clientes cuya visión del mundo no comparto, especialmente si no se alinea con un enfoque saludable y positivo.
Eres un artista multidisciplinar… ¿con qué disciplina artística te sientes más identificado?
Mis intereses han ido evolucionando con el tiempo. Comencé con la firme intención de ser artista 3D, y lo logré. Después he explorado muchos campos: diseño de juguetes, ilustración editorial, videojuegos, e incluso he trabajado como artista conceptual en la industria cinematográfica. Disfruto de todas estas facetas, pero es cierto que, en los últimos años, mi verdadera pasión se ha centrado en la escritura. Hay una satisfacción especial en, en lugar de ilustrar las historias de otros, crear las mías propias desde cero.

En el mundo literario has ilustrado sagas como la de Alex Colt de Juan Gómez Jurado, ¿cuéntanos cómo ha sido la experiencia?
Con Juan he tenido el placer de ilustrar más de una veintena de sus novelas, incluyendo sagas tan queridas como Alex Colt, Rexcatadores, y títulos de gran impacto como Reina Roja o Todo Arde. Sinceramente, me resulta difícil ser completamente objetivo al hablar de Juan, porque nuestra relación profesional derivó en una sólida amistad. Es una persona sumamente inteligente, con una visión muy clara y particular tanto de su trabajo como escritor como del mío como ilustrador. Si tuviera que destacar algo de nuestra colaboración, sería el inmenso aprendizaje que he obtenido a su lado. Ha sido una experiencia transformadora que me ha hecho mejorar considerablemente como ilustrador e incluso ha inspirado mi propia faceta de escritor.
También has estado metido en el mundo del diseño de juguetes etc… ¿cómo es trabajar en este ámbito?
Sí, mi andadura profesional comenzó en 2005 en Famosa, donde estuve hasta 2017. Posteriormente, he seguido vinculado al sector del juguete colaborando con otras empresas. Es un trabajo muy bonito porque, en cierto modo, te exige reconectar con tu niño interior. Debes aprender a pensar como un niño, entender sus gustos y necesidades, para poder ofrecerle un juguete de calidad que realmente le aporte algo. Es una experiencia sumamente gratificante, especialmente cuando tienes la oportunidad de ver a niños y niñas disfrutando con los diseños en los que has trabajado.
En el mundo del cine has estado involucrado en proyectos de Disney y 20th Century Fox, ¿cómo llegaste a ese mundo?
Como muchas cosas en mi trayectoria, llegué de forma un tanto inesperada y por una concatenación de casualidades. Conocer a Juan Gómez-Jurado me abrió un abanico de contactos y sirvió de escaparate para mi trabajo. Fueron ellos quienes me contactaron, y la experiencia fue muy intensa y estimulante. Sin embargo, también debo admitir que era un entorno extremadamente exigente, con unos ritmos muy demandantes, hasta el punto de que decidí tomarme un respiro de ese mundo durante un tiempo para centrarme en otros proyectos.

¿En qué proyecto estás ahora metido?
Actualmente, estoy principalmente inmerso en un proyecto para una plataforma de streaming, del cual, por motivos de confidencialidad, no puedo desvelar más detalles por ahora. Paralelamente, estoy trabajando en la escritura de tres novelas que espero poder anunciar a lo largo de este año. Una de ellas es la tercera parte de mi saga autopublicada, «Cosas Terribles». Las otras dos son una novela para público adulto y otra de corte juvenil, que serán publicadas a través de una editorial. Pero, de nuevo, tendré que esperar un poco más para dar más información.
¿Qué es lo que más te gustaría realizar en el futuro?
Ahora mismo, estoy disfrutando tanto de mi faceta como escritor que me resulta difícil visualizarme de otra manera que no sea escribiendo. Me siento muy realizado en este ámbito. No obstante, si pienso en un futuro más a largo plazo, me haría especial ilusión poder dirigir algún proyecto audiovisual. Trasladar una historia propia al lenguaje del cine o la televisión sería un reto fascinante.
Dinos tu novela gráfica preferida y por qué…
Aunque no se considera una novela gráfica en el sentido estricto, sino más bien una saga de cómics, Tintín es, probablemente, la obra que más me ha influido. Me marcó profundamente durante mi infancia y adolescencia. Las aventuras de Hergé me animaron a querer dibujar y a contar historias de esa naturaleza, llenas de aventura, misterio y personajes memorables. Fue una gran inspiración.

Un personaje que te hubiera gustado ser el creador y por qué…
Es una pregunta interesante. Me hubiera gustado mucho ser el artífice de ‘El Club de la Lucha’ y, en particular, del personaje de Tyler Durden. Me parece una creación sumamente potente y compleja.
Hablemos algo de música, ¿cuál es tu género musical preferido?
Con los años, mis gustos musicales se han vuelto bastante eclécticos. Disfruto del rock, el metal, el indie, la música electrónica e incluso las bandas sonoras, dependiendo del momento. Pero si tuviera que definirme con un solo género, diría que mi inclinación principal es el rock.
Un álbum sin el que no puedas vivir.
«Ten» de Pearl Jam, sin ninguna duda. Es un disco que tiene un significado muy especial para mí, y además, mi canción favorita de todos los tiempos, «Even Flow», pertenece a ese álbum.
Para los lectores de Mautorland, ¿podrías darles algún consejo para poder dedicarse al mundo del diseño y la ilustración?
Les diría que es un mundo que, como muchos otros ámbitos creativos, presenta sus desafíos laborales, pero que también es enormemente gratificante. Considero que el acto de «crear» es algo muy poderoso. Poder concebir diseños, ilustraciones, ideas, partiendo de cero, es una experiencia muy estimulante. Detrás de cada objeto que utilizamos, ya sea un utensilio de cocina, un coche, un libro, un teléfono o un videojuego, ha habido alguien que lo ha pensado y diseñado, y eso es algo admirable. Mi consejo sería que, si sienten esa vocación, perseveren con pasión y dedicación.