[Crítica] “El Renacido” – Alejandro González Iñárritu
Grandilocuente y excesiva, tanto en su metraje como en el apabullante espectáculo que nos ha regalado Alejandro González Iñarritu con este existencialista western llamado “El Renacido”. Si en su anterior film, “Birdman”, el director mexicano abordaba el tema de la espiritualidad del ser humano, confundiendo realidad con celuloide, en esta epopeya desgarradora, hace que Leonardo DiCaprio viva el purgatorio en la tierra enfrentándose, tanto la naturaleza más salvaje como a la suya propia: un hombre errante sin apego a nada, tan sólo a su hijo indio.
El film busca remover los instintos más básicos del espectador, llenando las pupilas de los presentes en la sala de cine, con imágenes llenas de fuerza y de una carga emotiva y tensional muy grande. A todo esto ayuda la excelsa fotografía de Emmanuel Lubezki, que ha sabido recoger de manera sobrecogedora las vivencias del atormentado DiCaprio dentro de unos paisajes bellísimos e increíbles.
El film aunque largo de metraje, tiene buen ritmo, no se hace larga la película, salvo en los momentos oníricos que utiliza Iñarritu, homenajeando a Terrence Malick, donde el film se desinfla algo, aunque enseguida la cruda realidad que vive DiCaprio nos devuelve de una bofetada al climax central del film.
“El Renacido” bajo un planteamiento histórico y basada la historia en hechos reales, toca muchos temas: la paternidad, la soledad del hombre ante la naturaleza, el egoísmo y la sin razón humana, otorgando a los paisajes montañosos un protagonismo casi primordial para entender la trama del relato.
El casting de actores es de lo más acertado, llevando el peso de la trama DiCaprio y Tom Hardy. Aunque todo el mundo ensalza la interpretación de DiCaprio, que con toda seguridad será merecedora de un Oscar, lo realizado a nivel interpretativo por Hardy en el film tiene tintes epopéyicos, y su papel será recordado tanto o más que el del protagonista antes mencionado.
El film de Iñarritu te arrastra por un viaje fascinante por la Norteámerica más brutal y salvaje, ofreciendo al espectador una visión desgarradora y cruel hasta decir basta de la condición humana; aún así la esperanza, aunque en cuenta gotas, asoma en el metraje de manera muy emotiva.
Obra maestra que pasará a la historia. Este film huele a Oscars por los cuatro costados, premios que ya va recogiendo y de manera muy merecida. Como decía DiCaprio en una entrevista “El Renacido” es un homenaje al cine de los 70; homenaje a aquellas películas tan cautivadoras y personales que por desgracia ya no se hacen.