Los sueños cine son: “The Goonies” (1985)
Qué maravilla. No se han borrado de mi memoria las sensaciones que viví en el cine al ver “The Goonies”. Ver esta película fue como entrar en un parque de atracciones y no salir de él hasta el final de su metraje. Me pasé todo un verano jugando con mis amigos emulando los personajes tan fantásticos que se reunieron en este film.
La película fue dirigida por Richard Donner, con guión del gran Steven Spielberg. La verdad que la historia lo tenía todo: tesoros, piratas, malvados delincuentes, aventura etc… Uno de los puntos fuertes de la historia es lo bien intercalado que estaba el humor dentro del film. Gags muy buenos que unidos a las escenas de aventura hacía del film algo imbatible.
Lo más potente de “The Goonies” son sus personajes. La pandilla de amigos que daban nombre al fin era de lo más dispar y cada uno reunía una característica muy marcada. Hay tres personajes que me maravillaron, por un lado “Data”, interpretado por Jonathan Ke Quan, un chico con una inventiva increíble, capaz de crear los aparatos y artilugios más disparatados, por otro Jeff Cohen en el personaje de “Gordi” y por último el gran “Sloth”( John Matuszak).
“Sloth” merece un capítulo aparte. Este personaje que surge como una abominación para “Gordi” y que termina siendo su mejor amigo, es de lo más logrado del film. Un antihéroe que aunque con evidentes dificultades como persona, las vence para convertirse en una pieza clave de la pandilla; la escena de la chocolatina es hilarante y de lo mejorcito en comedia de esos años.
Los malos, malísismos son totales. Los Fratellicomandados por la pérfida “Mamá” son el contrapunto perfecto al ingenio, juventud y audacia de la pandilla protagonista.
No debemos olvidarnos las aportaciones de un jovencísimo Josh Brolin, y de un más joven aún Sean Austin que es el protagonista apocado del film. Por último destacará a “Bocazas” encarnado por el pizpireto CoreyFeldman, que tan maravillosa interpretación haría también en “Stand By Me”.
“The Goonies” fue el comienzo del idilio que tengo desde pequeño con el cine. Una película inolvidable que cada vez que la revisito me gusta más; un canto a la aventura y las ganas de vivir.