“Extreme II: Pornograffitti”, la fama por la vía rápida de Extreme
“One hit wonder”, expresión muy utilizada en el ámbito musical para señalar a un artista o grupo que solo ha sido conocido por un éxito y después poco más. Muchas veces el éxito inmediato y popular es un arma de doble filo. Puedes quemarte como un cometa al acelerar demasiado y de manera asombrosa la gente deja de interesarte por ti. Algo parecido le ha pasado a Extreme a lo largo de su carrera artística.
Los norteamericanos se hicieron mundialmente conocidos por el tema “More Than Words”, una balada acústica con la que arrasaron en las listas de todo el mundo, con la ayuda inestimable de la MTV. La cadena de televisión más importante del mundo dedicada a la música, eligió ese tema como bandera de su difusión en todo el mundo. Todo estaba preparado para que Extreme fuera una banda reconocidísima y llena de éxitos, pero no llegaron a la cima, allá arriba, donde merecían llegar por su talento… ¿Qué ocurrió? 1992 llega el grunge y arrasa con todo.
Extreme era una banda que lo tenía todo, (por cierto han vuelto para regocijo de muchos), un cantante espectacular llamado Gary Cherone con una voz dúctil y maravillosa. La otra cara visible de la formación era el guitarrista lusitano Nunno Bettancourt, un superdotado de las 6 cuerdas, un tipo capaz de hacer riffs increíbles casi sin despeinar su maravillosa cabellera. La base rítmica no estaba coja: el gran Par Badger y el solvente baterista Paul Geary. Lo dicho, una banda que bebía de Queen, del funk, del rock clásico y que no tuvo el reconocimiento debido. Llegados a este punto vamos a intentar reconocerles su mérito hablando de su álbum más conocido, el maravilloso “Extreme II: Pornograffitti”. Su obra maestra estaba por llegar, sería “III Sides To Every Story”, pero su luz ya estaba más que apagada comercialmente hablando.
Tenemos que viajar hasta el 7 de agosto de 1990, en esta fecha se publica el álbum ya referido, y comienza una vertiginosa carrera mediática para Extreme, debido como hemos dicho ya por “More Than Words”. Tanto fue su éxito que fueron invitados al concierto homenaje a Freddie Mercury en Wembley para que la tocaran en directo e hicieran un medley de canciones de Queen.
“Extreme II: Pornograffitti”, lleva dentro de sus entrañas un puñado de canciones fantásticas, de corte hard rock, con toques funk perfectamente facturados. El álbum suena a las mil maravillas, con una producción más que sobresaliente y con una claridad de ideas compositivas realmente maravillosas. Comenzar con el corte “Decade Dance” es toda una declaración de intenciones. Un tema fresco, resuelto y que sirve como la carta de presentación perfecta para un álbum de estas dimensiones.
Otro tema que sirve para hacerse una idea del sonido que nos ofrecen Cherone y cía es “Get The Funk Out”. Otro corte marca de la casa que mezcla ese funk/rock/metal a las mil maravillas, y fue otro de los hits más celebrados del álbum. Qué bien suena esta canción!!! Pura crema.
La base como hemos dicho del sonido de la banda es un hard rock recio, de vieja escuela. Muestra de ello son canciones de la talla de “Li’l Jack Horny”, “Suzi (Wants Her All Day What?)” y “Money (In God We Trust)”. Son temas que rinden homenaje a bandas como Aerosmith, Bon Jovi, Queen, en definitiva los héroes que ellos tomaron como referencia para hacerse músicos. Canciones directas, al cuello y sin dejarte resuello si se me permite el pareado cutre que me ha salido.
Llega el momento de hablar de la joya de la corona. “More Than Words” puede definirse como la balada perfecta, el susurro maravilloso que llega a tu alma y te abraza por dentro. Me ha salido un poco cursi la definición pero es que es así. Una canción casi a capella, con una sincronización perfecta entre la voces de Cherone y Bettencourt con la guitarra a su vez del portugués. Un canción legendaria que le acompañó un video igual de legendario. Todo en blanco y negro. Los dos músicos sentados en taburetes, mientras son observados por sus otros dos compañeros que los contemplan sentados como si nada. Canción eterna que cuanto más la escuchas más te gusta. Su éxito y a la vez su tumba… cosas de la industria musical.
Seguimos por la parte balada del álbum. Nos sorprenden con “When I First Kissed You”, un baladón corte muy clásico que la hubiera cantado Tony Bennett o Frank Sinatra. Una canción dulce, de color sepia que llega de manera directa en los primeros compases.
En esta fase “blanda” me quedo con la maravillosa “Song For Love” un tema de una epicidad exuberante que nos muestra la mejor versión de una banda como Extreme. Un in crescendo maravilloso que termina de manera brutal alcanzado la voz de Cherone una fuerza y grandiosidad sencillamente maravillosas. Una canción para recordar siempre.
“Hole Hearted” cierra el álbum de manera dulce, con una canción a medio tiempo de corte acústico también. Un corte jovial, que también pegó fuerte en las listas y se convirtió en el último hit de este fantástico álbum.
Cierro hablando de los temas más potentes (hard rock) del álbum “It (‘s a Monster)” y “Pornograffitti”, caña pura y dura que hace las delicias del rockero/a más abigarrado. Pocas veces en el álbum la parte rítmica supera al tándem Cherone/Bettencourt y aquí pasa con creces. No me quiero dejar pasar la oportunidad de resaltar la maravilla que hace Nunno al comienzo del tema “He-Man Woman Heater”, haciendo una versión del “Flight of the Bumblebee” del compositor ruso Rimsky-Korsakov. Una obra maestra absoluta.
Fin de la historia. Fin de lo que pudo ser y no fue. Uno de los grupos más maltratados por la industria musical. Tenían calidad para llegar a lo más alto y se pasaron de frenada… cuando veáis un hit cerca tened cuidado con él porque os puede joder la vida.