Entrevistamos a Iñaki “Uoho” Antón (Inconscientes)
Recordamos esta entrevista realizada en la web Nos Gusta La Música.
Entrevistamos a una de las leyendas de nuestro país. Iñaki “Uoho” Antón además de seguir en Extromoduro, ha vuelto con su proyecto “Inconscientes”. Os dejamos esta interesante entrevista que nos dio.
¿Qué es para ti la música?
Es una necesidad y una forma de vida.
¿Hay que ser muy inconsciente para dedicarse al mundo de la música?
Tal y como está el panorama cultural del país, sí, hay que ser muy romántico y, por tanto, muy inconsciente.
¿Qué te da Inconscientes que no te de Extremoduro y viceversa?
Inconscientes me da rock’n roll en estado puro, bajar a la tierra, hacer conciertos en los que nos divertimos mucho… Extremoduro me da pie a mucha experimentación musical, a trabajar mano a mano con un tío muy creativo, a tocar en grandes recintos y tener la oportunidad de conocer como es la másica desde el punto de vista de un profesional, algo que, por desgracia, muchos buenos músicos no llegan a vivir.
¿Notas mucho el tocar para multitudes como en Extremoduro a después hacerlo para menos personas en salas con Inconscientes?
Muchísimo. Es muy diferente; difícil de explicar. A veces sientes más responsabilidad tocando para pocos, porque los ves a todos. Siempre me han encantado las salas, el rock directo, la transmisión de sensaciones sin adornos. Creo que el rock nació como música de club. Cada formato tiene su punto diferente, y disfruto mucho en ambos, aunque de distinta manera.
10 años entre el anterior disco y el otro ¿qué cosas hicisteis mal en vuestro primer disco que estos años os han ayudado a corregir en este?
Tuvimos prisa. Impaciencia. Teníamos muchas ganas de terminarlo y salir a tocar. Esta vez nos hemos tomado todo el tiempo necesario hasta quedar totalmente satisfechos.
¿Por qué decidisteis realizar un disco doble? Aunque es doble ambos álbumes están bastante bien diferenciados ¿lo buscasteis así?
Vimos que entre las canciones que teníamos había temas diferentes a los que esperábamos de nosotros mismos, pero no queríamos dejar de hacer un disco de rock-rock. Las tendríamos que haber apartado y quizá en un siguiente disco nos hubiera ocurrido lo mismo. Pero nos gustaban mucho, así que las juntamos en un disco “satélite”, que complementa al esperado. Es una oportunidad que tenemos de expresarnos de una forma diferente sin dejar de hacer lo que siempre hemos hecho.
¿Cómo se compone en Inconscientes? ¿Quién lleva la batuta?
En la mayoría de los casos, Jon y yo. Partimos de ideas muy pequeñas, de unos pocos segundos, muchas de ellas de Jon, y luego, a partir de ahí, trabajamos, completamos, arreglamos, estructuramos… hasta que tenemos algo que nos gusta y que se puede parecer a la idea primigenia o no. Es el método más habitual, aunque también hay canciones que vienen de otras maneras.
En el tema “Sin Fronteras” apeláis a mirarnos más a nosotros mismos, a comenzar la revolución desde nosotros ¿qué opinas?
Hemos hablado mucho de eso. Tendemos a esperar que las cosas cambien por si solas, y las cosas no cambian, cambian las personas y esas personas que cambian, cambian las cosas. Entonces esperamos que “todos los demás” cambien para que todo sea mejor.
No. Cada uno de nosotros tenemos que ser mejores. Yo tengo que ser mas guay. Sólo con eso, el mundo ya es mejor y, aunque siga habiendo mucho hijoputa, nuestro entorno mejorará sensiblemente.
Salas vacías, poco apoyo institucional por el rock, bandas tributo ¿qué hemos hecho para llegar a esta situación? ¿Lo ves tu así, tan poco esperanzador el futuro del rock nacional?
Lo veo muy mal, pero no hay que perder la esperanza. El panorama cultural ahora mismo en el país es muy deprimente. Interesa más el cotilleo, la música de usar y tirar, la literatura facilona…
Eso lo demuestra, por ejemplo, el apogeo de los libros semiplagiados de éxitos ya existentes, o, más en nuestro entorno, las bandas tributo, gente sin talento ni cualidades interpretativas que llenan espacios mientras los grupos de verdad, los que crean, no venden entradas. Queremos cosas fáciles, conocidas, aunque suenen como el culo. Comida de macDonalds. Una mierda. Usar y tirar.
Sería fácil echar la culpa a los grupos tributo, pero ellos no la tienen. Sólo son gente sin talento, que copian mal y que quieren ganar dinero. El horror está en cada uno de nosotros, que ya no queremos descubrir música como hace unos años. De nuevo volvemos al tema de la mejora individual.
La cultura en España, en esta década, está de luto.
¿Qué opinas de que un tipo como Kiko Rivera (Paquirrín), consiga discos de oro en este país por su música?
Eso se comenta solo. No es que la gente se ría y tal, no. Es que lo compran y, a lo mejor, hasta lo escuchan. Y después pagarán un entrada para ver al bufón. Allá ellos.
¿Cómo valoras la irrupción de Internet y las redes sociales en el mundo de la música?
Como todo, tiene su lado bueno y su lado oscuro. Es como las fotografías. Han perdido gran parte del valor que tenían sólo por el hecho de tenerlas a miles. Ya no las miramos, ni las recordamos, ni siquiera sabemos encontrar la que nos interesa. Con Internet pasa un poco lo mismo. Queremos mucho, nuevo, más y más, y no nos paramos a escuchar 100 veces un buen disco y conocerlo, que es lo suyo. Creo que Pink Floyd en esta era no hubiera sido lo mismo. Queremos mucho, pedimos cantidad, y ya no apreciamos ni disfrutamos de lo bueno. Como el que va a un país de vacaciones quince días y quiere conocer treinta y cinco lugares de ese país. Contará muchas cosas a la vuelta y mostrará miles de fotos, pero no ha conocido el país. Si se hubiera quedado unos días en cada sitio, o los quince un un paraje realmente interesante, su viaje hubiera sido mucho mejor. Internet, como en el ejemplo, nos empuja a esta forma desmedida de consumo irracional.
Planes inmediatos para este año…
Tocar. Disfrutar.
Para los seguidores de NGLM (Nos Gusta La Música), ¿por qué deben escuchar la música de Inconscientes?
No deben, pero si quieren, recomiendo un buen equipo de música o unos buenos auriculares, y dedicar aunque sea media hora exclusivamente a escuchar música. A escucharla de verdad. De Inconscientes o de quien sea que haya hecho un buen disco.