Portadones, portadas y portadillas: El bebé más famoso de la historia del rock (“Nevermind” -Nirvana)

Pocas portadas son tan icónicas como la del álbum de Nirvana “Nevermind”. El mundo quedó asombrado no solo de los temas tan impresionantes que formaban parte de ese grandioso álbum, si no de la llamativa portada del bebé sumergido en una piscina y que supuestamente va detrás de un billete de un dólar. 

La portada del álbum no era en principio esta. Kurt Cobain se había dedicado a fotografiar objetos extraños, juguetes etc… y se inclinaba por poner en  la cubierta del disco a Chim Chim, una mascota de goma, perteneciente a una serie de dibujos japonesa. 

El homínido no aparecía solo, se encontraba rodeado de vaginas enfermas pertenecientes a una colección suya de fotos médicas y de carne cruda procedente de un anuncio de un supermercado, además de alusiones al “Infierno de Dante” y memorabilia del grupo Kiss; toda una bizarradaen toda regla. 

La banda no la tenía todas consigo, y dan con Robert Fisher, un empleado del departamento artístico de GeffenRecords, que les invita a olvidarse del mono y buscar otros caminos. 

En esa época Cobain y Ghrol habían visto un documental sobre partos bajo el agua, y pensaron que esa podía ser una buena idea para la portada. El propio Fisher la descartó para esquivar la censura, y piensan en la foto de un bebé dentro del agua que también habían visto, 7.500 dólares costaba hacerse con los derechos de ella, y ni que decir tiene que por el precio tan excesivo pasan del tema. 

Deciden que la idea es buena y hacen la guerra por su cuenta. En la escuela de natación Rose Bowl AquaticCenter de Pasadena se hace un casting con bebés y niños pagándoles a los padres 200 dólares por la sesión.  

Kirt Weddle fue el fotógrafo encargado de hacer las sesiones, con los bebés. Curiosamente semanas después haría la misma sesión en dicha piscina, con los componentes de Nirvana. 

El bebé elegido finalmente es Spencer Kenneth Royce Elden, de tres meses, el hijo de unos amigos suyos, Rick y Renata Elden. Como curiosidad decir que si se mira con detenimiento la foto se puede ver la huella de la mano de su padre que lo acaba de lanzar hacia su madre en el otro extremo de la piscina.

La idea del anzuelo es posterior, la banda y Fischer piensan que la cubierta tiene que tener algo onírico, una imagen que dé  que pensar a los fans al mirar la cubierta. Y así lo hacen, ponen ese anzuelo con el billete, dejando a la imaginación la interpretación de esta foto. Cobain dejó a libre la interpretación de la portada. A simple vista puede parecer que nacemos, y enseguida nos corrompe el capitalismo; lo que queda claro es que el impacto fue total.

La contraportada estaría compuesta por el gran ChimChim, y las bizarradas explicadas anteriormente creadas por la mente excesiva de Kurt Cobain.

Al presentar la portada a la compañía, tuvieron dudas bastante potentes para dar el visto bueno. Alegaban que enseña de manera explícita el sexo del bebé les iba a traer consecuencias negativas de parte de la sociedad más reaccionaria norteamericana. Cobain se negó en rotundo a quitarla, incluso comentó de poner una etiqueta en el disco que pusiera: “Si te ofendes por esto, entonces es que eres un pedófilo encubierto”.

Por suerte se pudieron salvar todos estos impedimentos y dudas, y la portada se publicó tal cual.

Pocas veces ha pasado, pero ésta es una de ellas; un álbum llegó a ser casi igual de famoso, tanto por su música como por su portada, y éste fue: “Nevermind”.

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